martes, 1 de febrero de 2011

Primacoustic London 12A Studio Kit: ¿toma el control de tu habitación?

Introducción

Sigo intentando mejorar la acústica de mi ¿sala de control?. He comprobado con horror como una mezcla que suena bien escuchada por los monitores se convierte en un archivo MP3 realmente malo. He probado corregir los problemas de ecualización primero con una solución software: IK Multimedia ARC.

ARC ayuda bastante pero, presenta un sonido muy "lavado" y, aunque ayuda a corregir las deficiencias modales de la sala, no ayuda en otros problemas típicos derivados del exceso de reflexiones cercanas (fluttering echo, filtro peine, por ejemplo), como he podido comprobar tras grabar la voz con un Rode NT2-A.

En las pruebas de grabación de la voz se han creado reflexiones que han "doblado" algunas palabras, con un desfase temporal inadecuado, quedando el resultado borroso. Aunque no se ha visto afectada toda la pista, hay trozos que presentan problemas claramente derivados de las reflexiones cercanas.

El filtro T.Bone Micscreen no parece ayudar demasiado a proteger de las reflexiones al sensible micrófono de membrana grande.

En esta situación, me he visto empujado a ir un paso más allá: tratar la habitación acústicamente; algo que he evitado por dos motivos fundamentales: el elevado coste y su "alteración estética".

¿Por dónde empezar cuando no se tienen conocimientos técnicos suficientes?.
Me ha parecido una idea aceptable el intentar resolver los problemas de la habitación mediante la compra de uno de esos kits para pequeños home studios.

Después de bucear en muchos foros, parece que nadie aboga por esta solución. De entre los que la "soportan", casi todos coinciden en que una solución a base de espuma de alta densidad NO soluciona nada y, además, tiene problemas de durabilidad (al parecer, la luz solar y otros agentes atacan a la espuma, que acaba deshaciéndose, con el consiguiente impacto negativo en el look de tu estudio.
Como mal menor, se aceptan las soluciones no basadas en espuma de alta densidad.

Después de ver las distintas ofertas de este tipo, me pareció como la mejor opción Primacoustic London 12A Studio Kit. En primer lugar, los paneles eran de fibra de vidrio (en vez de espuma) y, en segundo lugar, parecía venir con un sistema de anclaje de los paneles totalmente reversible. Puesto que esta no es mi casa definitiva, me interesaba una solución que se pudiera instalar, desistalar y trasladar a otro entorno.
Rompiendo otra vez el crédito de la tarjetita, he comprado el kit y, aquí dejo mi experiencia.


Presentación


Todo el kit viene empaquetado en una caja de considerables dimensiones, marcadas por los dos paneles de "control de bajos".  Viene bien empaquetado e incluye 100 tacos y 100 tornillos para sujetar los anclajes de los paneles e incluye también una broca (cosa curiosa). Finalmente, todos los anclajes de los paneles vienen también incluídos en el pack.

Un bonito tríptico de propaganda (en inglés) sobre sus maravillos productos y, ni un puñetero manual que ayude a adivinar "cómo me la maravillaría yo". Por suerte, en su web, existe una guía de instalación (en inglés, también) perfectamente clara y fácil de seguir, además de algún video demostrativo (también en inglés), con lo que la tarea de planificar la instalación se hace más evidente.


Los paneles

Lo primero que hice fué curiosear los paneles... ¿de qué están hechos?, ¿cómo están construidos?, ¿qué tienen de especial?.
Primera decepción. Los paneles son placas de lana de fibra de vidrio compactadas, que han sido recubiertas por algún tipo de barniz (resina epoxi, supongo), para evitar que la lana se desmelene y, cubriéndolo todo, una tela (según la propaganda, acústicamente neutra), pegada a su parte posterior.
Una cosa curiosa, el producto dice que los paneles están fabricados en China, mientras que el ensamblado se ha hecho en Canadá. ¿Qué hacen los Canadienses que no puedan hacer bien los Chinos, en algo tan simple?. Sospecho que esta es la escusa barata para elevar excesivamente el precio de un conjunto de paneles de lana de fibra de vidrio muy por encima de su valor de coste.
Vamos, que he visto que el metro cuadrado de fibra de vidrio en el Brico Depot va a unos 2 Euros.

Las 8 "columnas de control" son, aproximadamente, unos 3 metros cuadrados.
Las 2 "columnas anchas" son, aproximadamente, unos 1,5 metros cuadrados.
Las 12 "baldosas" son, aproximadamente, unos 1,1 metros cuadrados.

¡¡¡En total, unos 5,6 metros cuadrados que, a 2 Euros, son 11,2 Euros!!!

Vale, están los anclajes en acero, troquelados.
En total hay 28 para los paneles "normales" y 8 especiales para los paneles esquinados.
Primacoustic vende 24 broadway impalers al precio de 46 Euros. Venga, vamos a comprar 2 packs de 24 para tener los 28 necesarios: son 92 Euros.
Los 8 impalers para los esquineros se venden por 69 euros.

Sumando todo, vamos por 172,2 Euros.

Pongamos una tela adecuada, a unos 5 Euros el metro y, que necesitemos 3 veces los metros lineales de los paneles, es decir unos 18 metros, por 5 Euros... 90 Euros.
Vale, ya llevamos 262,2 Euros.

En definitiva, que sumando los tacos, tornillos, el barniz epoxi, la cola para pegar la tela al panel, etc, que por unos 300 Euros, si eres un manitas, te los haces tú mismo y, además, le colocas la tela que te da la gana que, al fin y al cabo, van a decorar o estropear la imagen de tu estudio.

Si lo hubieran fabricado totalmente en China, puesto que el precio de la mano de obra es despreciable y, envían toneladas de material (con lo que los costes de envío bajan considerablemente), a lo mejor teníamos un producto terminado por 400 Euros.
Hasta los 722 que cuesta... pues eso... ¡que me lo expliquen!.

Si bien, el aspecto de los paneles es resultón, su olor es sumamente desagradable. Digo yo que, por el precio, podrían haber incluído alguna esencia de esos perfumes que tanto gustan a los asiáticos.


La Instalación

Bueno, he de reconocer que, aunque lleva su tiempo, es bastante fácil pero... ¿hace falta complicarse tanto la vida?.
He sopesado en la mano los paneles e, incluso los más grandes, son muy livianos, fáciles de manejar con una sola mano.
El sistema de anclaje consiste en colocar 1 "impaler" para las piezas cuadradas pequeñas, 2 "impalers" para las columnas de "control" y 4 impalers especiales para las piezas esquineras.
Los impalers normales se montan con 2 tornillos y, los esquineros requieren 4 (aunque yo los he instalado con dos tornillos en diagonal, que ya está bien la broma, hombre).

Los tornillos y tacos son del 6 que, sinceramente, están sobredimensionados para el peso de los paneles.
Si te pones a sumar, 8 columnas de control requieren (2 x 2 x 8 = 32 tornillos), 2 columnas esquineras (2 x 4 x 4 = 16 tornillos) y 12 paneles cuadrados (12 x 2 = 24 tornillos). En total, 72 tornillos. ¡¡¡72 agujeritos en la pared!!!.

En mi humilde opinión, TODOS los paneles, excepto los esquineros, podrían colocarse sin temor alguno a que cayeran, utilizando una cantidad adecuada de cinta velcro, lo que reduciría el tiempo de instalación a algo realmente irrisorio. Los únicos paneles que, posiblemente, necesiten los anclajes especiales son los esquineros, el resto, con velcro industrial van sobrados.

Pero, si quieres seguir la instalación recomendada, pues eso, paciencia.
Yo he creado 3 líneas rectas utilizando 6 chinchetas y un hilo, que me daban: el nivel superior de ajuste de los paneles, la posición del impaler superior y la posición del impaler inferior.

¿Y, una vez montado, qué tal queda?.

He de reconocer que le da un aspecto de estudio "profesional" a la habitación. Los paneles están bien acabados y, la tela elegida tiene un color neutro que encaja muy bien en el entorno, no desentonando nada.
Eso sí, me he quedado sin pósters.


De la teoría a la práctica

¿Estudio LEDE?

Dos son las ideas básicas que "sustentan" la bondad de este kit: el equilibrio estéreo y la creación de un espacio LEDE.

¿Qué narices es un espacio LEDE?.
LEDE significa Live End / Dead End (o sea, Parte Viva / Parte Muerta).
El concepto se basa en dividir la habitación en dos zonas de igual tamaño, una zona viva (con reflexiones y su canesú) y una zona muerta (donde no se acepta más rebote que los que pilla el ingeniero de sonido).
La mayoría del kit debería ser instalado en la parte muerta (alrededor del punto de escucha), para "matar" las reflexiones cercanas, que son muy malas, malísimas, vaya.
En la parte viva, básicamente se instalarían los paneles cuadrados para ayudar a la difusión del sonido.

Todo esto es muy bonito pero, a ver dónde tiene cada uno su estudio casero y, qué formas, puertas, ventanas, librerías, armarios, radiadores y demás juguetitos malignos tiene la puñetera habitación.
O sea, que en mi caso, he hecho lo que me ha permitido el espacio y, aunque entiendo la teoría que hay detrás, he preferido "meter toda la carne" en los laterales y parte posterior del centro de escucha porque, delante, ni la ventana ni el radiador ni las dos puñeteras puertas me dejan espacio para virguerías.

Así que no sé si ha quedado muy LEDE la cosa pero, mi mujer dice que ha quedado la LECHE.


Muy bonito, pero... ¿funciona o qué?

Después de la paliza del montaje, se hizo demasiado tarde como para poder probar mi "nuevo" estudio como era menester. Eso y, la mosca detrás de la oreja, con auténtico terror a probar y descubrir que me habían soplado un dinero que voy a tardar meses en devolver por un montón de basura de obra reciclada.

Aún tardé un día más en hacer la prueba. Lleno de terror, enciendo la tarjeta, los monitores y cargo la pieza en la que estaba trabajando justo antes de meterme en todo este fregado.

Hummm... ha desaparecido gran parte del "boom-boom" molesto y, es más fácil trabajar con las reverberaciones ahora. Mezclo con los monitores y hago un "bounce" de la mezcla, convertida a MP3.
¡Vaya!, por primera vez se parece bastante el sonido del MP3 al sonido que he conseguido a través de los monitores. La mezcla sigue presentando problemas pero, por primerísima vez, se ha trasladado sin que los medios se hinchen como globos y sin que los bajos me dejen la cabeza como un bombo.
¿Efecto placebo?.

Mi analítico cerebro coge las riendas de mi corazón desbocado y, el diablillo de la izquierda me comenta: "oye, que lo mismo QUIERES escuchar una mejora porque te ha costado un huevo y parte del otro. Coge el micrófono del ARC y comprueba si se han corregido los problemas de ecualización".

Me espero un día más para hacer la prueba con el ARC, no vaya a ser que me den arcadas.
Monto el micro, lanzo la aplicación y me dedico a tomar 24 muestras en el punto de escucha y alrededores (lo que incluye el sofá donde holgazanea la perra, cuando mezclo con cascos, claro).

Aquí los dos gráficos (¡Ay, que me da la risa tonta!):

Primero, tal y como estaba antes de intentar curar las pupitas con el kit de Primacoustic:


Y, este el gráfico después del "tratamiento":


Comparando ambos gráficos, no sé si ponerme el sombrero con las orejas de burro o hacerme el hara-kiri.
En la parte derecha se nota un aumento del rango de frecuencias medio-bajas, respecto a la situación anterior y, ésto, señores, se debe a que HE CENTRADO la mesa, buscando el balance estéreo y, por eso, ahora tengo problemas muy similares (muy balanceado, si señor) en ambos lados.
No solo eso sino que los picos ya existentes antes del tratamiento, en la región entre los 100 y 200 Hz parece haberse incrementado. Las líneas naranjas corresponden al desvío de la curva objetivo (respuesta plana, en verde), según las mediciones de ARC. Las líneas blancas corresponden a la curva que consigue ARC tras las correcciones de ecualización.
Yo diría que las anomalías que ya existían siguen estando e, incluso, se han acentuado.
Eso sí, parece haber mejorado bastante la banda de "aire", que ha recuperado una bocanada de unos 6 dB.
Parece haber elevado la zona de medios-agudos o agudos, donde están los armónicos de segundo orden y la presencia de los instrumentos, por encima de la curva plana, algo que estaba bastante bien ANTES.
La respuesta en bajos parece haber perdido también.


Conclusiones

Tengo sentimientos cruzados y estoy mas "confundido" que Dinio. Por un lado, es cierto que SIENTO una clara diferencia hacia mejor. En la habitación retumbaban los bajos de una forma realmente desagradable y, ésto se ha solucionado, diría que en un 80%. La mejora es claramente perceptible, diga lo que diga el gráfico de ARC. Si dicha mejora se debe a que la banda de aire está mejor representada o no, no lo sé.

En lo que si no me cabe duda es en su eficacia contra el efecto peine y contra las excesivas reverberaciones. Aquí si he notado una clara diferencia.

¿Arregla los problemas modales?.
NO, NO y RE-NO.

Casi todas las habitaciones pequeñas sufren de modos de resonancia que acentúan las frecuencias entre 120 y 200 Hz (Hz más, Hz menos) y, está claro que los paneles estándares de absorción no son capaces de resolver este insidioso problema. Estos modos producen un sonido confuso, con bajos poco definidos, enmarañados y cansinos para la escucha.
Según todos los expertos, las trampas de bajo auténticas son la única cura.

Las trampas de bajo siguen diseños matemáticos y, conceptualmente son más complicadas. Trabajan con diafragmas, por ejemplo. No veo tan fácil hacerselas uno mismo y que den resultado.
Claro que, el precio de cada trampa de bajo es realmente escandaloso, por encima de los 400 euros y, como mínimo, son necesarias 2 trampas de bajo, situadas cerca de las esquinas.

¿Me recomiendas el kit?

Sinceramente, NO. Ni éste, ni ningún otro. Se pagan gusto y ganas. El kit ayuda con las reverberaciones y, al parecer, mejora la banda de aire pero, no es capaz de manejar los modos de la habitación, que son el otro gran problema para mezclar convenientemente.

Puesto que está claro que con material de cierta densidad se puede conseguir reducir las reflexiones cercanas, existen muchas posibilidades de conseguir dicho efecto a un coste mucho menor, haciéndotelo tu mismo. Paneles de fibra de vidrio, cortinas espesas, cualquier cosa con masa y superficie irregular que aumente la superficie de la pared en las 3D puede ayudar a controlar las reflexiones cercanas.

Sin embargo, para el problema de los modos de la habitación, parece que la única cura son las trampas de bajo y, éstas no son tan fáciles de construir. Bob Katz (y muchos otros) recomiendan las Real Trap de Mondo.
En mi honesta opinión, gástate el dinero en trampas de bajo buenas y, haz cuatro chapuzas para reducir la reverberación.