domingo, 9 de mayo de 2010

Prueba de pastillas: Bareknuckle Nailbombs

He cambiado las Dimarzio Evolution (mástil) y Tone Zone (puente) en mi Charvel Socal Type 1 con un par de Nailbombs.

Estas Nailbomb empujan bien el amplificador, mientras retienen la claridad en las notas. Puedes obtener infinitos sobrearmónicos y hacer que la guitarra chille como un cerdo.

La pastilla del mástil suena abierta y definida. No es una pastilla de alta ganancia, tan solo la justa. No es una PAF, ni tampo es moderna. Es algo entre medio, así que puede cubrir mucho territorio.

La pastilla del puente me ha sonado más cargada de medios pero, es una bestia chillando.

Ambas son muy responsivas. No suenan tan complejas como las The Mule, no hay esa explosión valvular que éstas últimas producen pero, los ricos sobrearmónicos ayudan mucho al estilo Hard Rock e, incluso al Shredding.

Comparadas con las pastillas de serie, son una clara mejora. La guitarra suena mucho mejor para mi gusto, justo para aquello para lo que usaré esta guitarra.

Probablmente me esperaba unas humbuckers más oscuras pero, me suenan más bien agudas que graves (sin ser chillonas). Como cualquier otra Bareknuckle, son muy sensibles a la altura de la pastilla, así que asegúrate de perder suficiente tiempo hasta obtener el sonido deseado. Un cuarto de vuelta de distornillador provoca una gran diferencia.

Concluyendo: las Bareknuckle Nailbombs son una buena elección como substitutas de las pastillas que monta la Charvel Socal Type 1 de serie.