martes, 15 de abril de 2008

Introducción / Presentación / Biografía no solicitada por nadie

¡Bienvenido a mi blog y, gracias por tu atención!.

 Como soy dado a olvidarlo todo, este blog me sirve de almacén centralizado de conocimiento. Todo lo que vaya descubriendo o recordando será publicado aquí. Puede que también sea útil para tí.

Estoy interesado en todo lo que está relacionado con la música pero, principalmente, con todo lo que está relacionado con las guitarras eléctricas y, por tanto, con los amplificadores y pedales de efecto, aunque la mezcla y producción musical también me resultan de interés porque, en definitiva, soy una banda de un solo hombre y, me lo tengo que hacer yo todo.

Aquí es posible encontrar artículos sobre pruebas de material (guitarras, efectos, amplificadores) y de software (plugins), así como una especie de guía introductoria al cableado de guitarras eléctricas.

Como todos solemos seguir el mismo camino en este mar de notas, es posible que estés luchando con algo por lo que yo ya haya pasado o, puede que sea yo el que esté probando algo en lo que tu puedas ayudar.
Me encantaría que este blog fuera interactivo pero, he tenido que desactivar los comentarios porque una banda de chinos estúpidos se ha dedicado a bombardear los blogs con enlaces a páginas sexuales, las cuales, sean interesantes o no, no añaden nada de interés a éste mi blog.


Mi pequeña historia musical (de dónde vengo, a donde voy...)

Dejemos las cosas claras: YO NO SOY NADIE. Soy un entusiasta de la guitarra eléctrica pero, nunca he logrado vivir de la música, ni creo que a estas alturas vaya a conseguirlo.

Soy un músico y guitarrista autodidacta que, desafortunadamente, empezó realmente tarde este maravilloso viaje. Según mis padres, yo llevaba pidiendo una guitarra para reyes todos los años, desde que empecé a tener conciencia. Mis padres nunca me tomaron en serio, puesto que tengo tendencia a que me interese todo pero... por poco tiempo, cambio de hobby a la velocidad del rayo.
Finalmente, a los 18 años, una tía mía se apiadó de mí y me regaló una guitarra española.

No tenía más idea sobre música que la que había aprendido tocando la flauta dulce en el colegio y, peor, no tenía ni idea sobre guitarras. La situación económica de aquel momento era realmente mala en mi familia, así que pensar en clases privadas no tenía ningún porvenir.
El primer día intenté afinar la guitarra, sin saber ni tan siquiera en qué consistía afinar una guitarra. Tensando las cuerdas rompí un par de ellas, momento en el que me dí cuenta que: 1) tenía que localizar una tienda de música en el barrio y 2) tenía que hablar con algún amigo para que me enseñara 4 cosas básicas sobre guitarras.

Mi amigo José Luís Martínez (al cuadrado) me enseño lo básico. Por aquel entonces, ya había aprendido a defenderse siguiendo algún cancionero de los Beatles y de los Boys Scouts. Me enseñó cómo afinar una guitarra con un diapasón y, lo primero que hice fué comprar un diapasón para poder afinar la guitarra.
Me enseño los acordes básicos y, recuerdo que fué especialmente duro conseguir que el FA mayor or menor sonara límpio. Los acordes barrados parecían hechos para destrozar las manos pero, una vez dominados, fué muy gratificante ver que un par o tres de figuras se podían repetir a lo largo del diapasón para obtener todas las notas.

Dentro del primer año, ya empecé a dominar los acordes y, otro amigo de mi amigo me enseñó a arpegiar ciertas piezas fáciles.

Aunque fueron muy útiles para mi aprendizaje básico, los Beatles, La Casa del Sol Naciente y resto de canciones de acampada, mi alma pedía a gritos Rock'n'Roll y, en mi cabeza, mi guitarra clásica sonaba electrificada, a gran volumen y con excitantes efectos. Mi esencia pedía a gritos una guitarra eléctrica.

A los 19 años, conseguí trabajar durante el verano en el supermercado de un camping. Mi función era básicamente mozo de almacén y la venta de hielo para neveras portátiles (partía unas 40 barras de hielo en un espacio de una a dos horas). Al final del verano, tenía en mis manos muy poco dinero pero, al menos, tenía algo de dinero para intentar comprar una guitarra eléctrica.

¡Cielos!. Las guitarras eléctricas eran carísimas y, no podía comprar ni la más barata. Tras mucho buscar, encontré una tienda (La Lonja del Instrumento) en el barrio de Gracia, donde se vendían guitarras de segunda mano. Yo disponía de 11.000 pesetas (66 EUR) y, con ese dinero conseguí (al fin) comprar mi primera guitarra eléctrica (muy, muy usada). Para que te hagas una idea, la Fender American Standard Stratocaster valía 1200 EUR.


La Necesidad alimenta el Cerebro (o, cómo aprender guitarra a pesar de todo)

Vale, tenía una guitarra eléctrica en las manos pero, ¡vaya por Dios!, si no la enchufas no suena. No tenía dinero para comprar ni el más ridículo amplificador de guitarra, ¿qué podía hacer?.

En aquella época, mi padre había comprado un grabador de cintas de audio Inter, que incluía un micrófono, con el que había grabado a sus hijos haciendo distintas monerías (cantar, contar chistes, etc).
Se me ocurrió que, si a las pastillas de la guitarra se las llamaba también micrófonos es que debían funcionar como micrófonos y, por tanto, tenía que haber un medio de utilizar la guitarra en vez del micrófono.

Me busqué la vida con las especificaciones del aparato, pelé un par de cables de cable eléctrico que había por casa y probé conectar tierra con tierra y la señal con uno de los pines de señal del conector DIN5 del grabador y... ¡FUNCIONÓ!.
¡El grabador INTER se convirtió en mi primer amplificador de guitarra eléctrica!.

Durante las pruebas descubrí que, a medida que el volumen pasaba del número 6, el sonido empezaba a distorsionar. Con el volumen a tope, tenía plena distorsión. Bueno, bueno... ¡era un ampli con distorsionador!, ya podía empezar a pensar en el Rock.

¿Y crees que todo acabó así?. No, compañero de las seis cuerdas. El aparato era un grabador de cintas de casette así que, podía grabar compañamientos en la cinta y tocar los solos mientras los reproducía. Así que el grabador se convirtió en mi primer sistema de grabación monopista.

Durante ese mismo año encontré un nuevo amigo (José Luís Gómez). Su padre le estaba construyendo una guitarra eléctrica que, era una copia de una Fender Telecaster (en aquel momento, no tenía ni idea de marcas ni modelos así que, para mí, simplemente era una bonita guitarra). El llevaba ya 15 años tocando la guitarra y tenía en su casa una guitarra acústica. También estaba estudiando Electrónica y siempre tenía revistas de electrónica que incluían diagramas de pedales de efectos.
Al parecer, el se había construído ya un Fuzz (¿eso qué és?) y un Distorsionador y, estaba construyendose en ese momento un Wah-Wah (¿el qué?), aunque su sonido favorito era el Phaser (¿cómo dice, perdón?) pero, era demasiado complicado y se lo iba a comprar (un MXR Phase 90).

Este amigo me enseño cuatro conceptos básicos de electrónica. Lo suficiente para ser capaz de interpretar un diagrama sencillo y ser capaz de construir mi propio pedal. Con él, inicié las visitas a las tiendas de Radio, donde vendían componentes electrónicos. Aprendí a diseñar los circuitos usando tarjetas de pistas de cobre agujereadas (cortando aquí y allá), y a soldar. Con su ayuda, conseguí construir mi primer pedal de efectos: un Fuzz. Al parecer, era el proyecto más simple que podía escoger para empezar y, a mí me daba lo mismo por dónde empezar, porque cualquier efecto que tuviera ya era un éxito.

En el Instituto, paralelamente contacté con otro amigo que era una especie de mini genio científico. Éste me enseñó una técnica más avanzada para hacer los circuitos. Se podía utilizar una tarjeta de fibra de vidrio, recubierta con una capa de cobre, sobre la cual se podía dibujar el circuito con un rotulador especial (anti-ácido). Al someter la placa a un baño de ácido, el cobre que no estaba cubierto por el rotulador especial desaparecía, quedando un circuito impreso casero bastante aceptable. Con él construí mi segundo pedal: un distorsionador.

No he llegado a construir más pedales. En cuanto tuve un poco de dinero, me compré un Wah-Fuzz y, algo más tarde un Flanger MXR (el gris) y, con ese equipo básico es con el que estube funcionando durante muchos, muchos años.

En cuanto a mi aprendizaje con la guitarra. Pronto me dí cuenta de que en mis solos era bastante difícil acertar con las notas, de forma que todo sonara bien. Había notas que no encajaban y, por tanto, entendí que debía existir alguna lógica detrás.

Con una rueda básica de acordes, correspondiente al tema que estaba componiendo, cogí mi guitarra clásica y pegué un circulo adhesivo de papel en el traste bajo cada nota que encajaba con la sucesión de acordes.
Pronto, tuve todo el mástil recubierto de pegatinas de papel. La cosa funcionó muy bien, si tocaba aleatoriamente sobre los trastes con las pegatinas, hiciera lo que hiciera encajaba con los acordes, eso sí, unas cosas sonaban más interesantes que otras.

Tenía que buscar un medio de memorizar dichos puntos para poder trasladarlos mentalmente a mi guitarra eléctrica, así que decidí dividir el mástil en grupos de máximo 4 trastes. Pinté de un color el primer grupo y, de otro color el siguiente grupo. Los puntos comunes a dos grupos (final de uno, principio de otro) los pinté mitad de un color, mitad de otro. Con eso, conseguí visualizar un conjunto de 5 figuras que, ¡oh, sorpresa!, se repetían a lo largo del mástil.
En aquel momento, no tenía ni idea ni tan siquiera de que existían las escalas. Actualmente, tengo claro que descubrí por mí mismo las figuras en forma de caja pertenecientes a la escala Pentatónica menor. Aún hoy día, esas figuras son la base de mis solos. Añado o quito algún dedo en alguna posición, dependiendo de la rueda de acordes.

Tocando en un grupo (La Necesidad de Expresarse)

En el Instituto, tuve la ocasión de conocer a otros compañeros interesados por la música. Un nuevo amigo (Diego Orta) tocaba el órgano y, tenía otro amigo (Juan Bautista) que tocaba la batería. Por mi parte, otro amigo (Rubén Gonzalez) tocaba el bajo. Así que junto a mi otro amgio (José Luís Gómez) formamos el primer grupo, al que llamamos NOSTOC.
El nombre fué elegido abriendo una página al azar en una enciclopedia y, buscando dentro de la página un nombre que sonara bien. Creo recordar que Nostoc era algun tipo de alga microscópica.
Más tarde, se incorporó a dicho grupo otro amigo mío (Javier Rodríguez) que, en aquel momento, se dedicó a la percusión.

No tengo ni idea de quién era el amplificador con el que tocabamos, posiblemente de Diego el caso es que, por primera vez escuche mi guitarra en un amplificador de verdad, aunque yo seguía sin dinero para comprarme uno. Si ya me gustó cómo sonaba en el grabador Inter, una vez escuché la guitarra en un amplificador, me quedé totalmente atrapado.
Yo compuse los temas, que nunca llegaron a sonar bien, puesto que todos éramos principiantes y, ni yo tenía la habilidad suficiente para traspasar lo que oía en mi cabeza a los demás, ni ninguno teníamos habilidad suficiente para tocar grandes cosas. Curiosamente, el primer tema que compuse para el grupo (Dueño del Sol) sigue siendo el tema más complicado de secuenciar con el que me he encontrado. He conseguido secuenciar muchísimos otros temas antes que éste y, me temo, que el primer tema que compuse se convertirá en el último tema que conseguiré algún día grabar.

Lo único positivo de este grupo es que nos impusimos unos horarios de ensayo bastante rígidos y, todo el mundo cumplía con los días y horas de ensayo pactadas. Algo así nunca volvió a darse con ningún grupo posterior.

Como curiosidad, durante la fiesta del instituto, tocamos junto con el grupo de Manolo García. Por aquel entonces, su grupo se llamaba Los Rápidos (posteriormente: Los Burros y, finalmente, El Último de la Fila). Más curioso aún, Manolo García llevaba exactamente la misma guitarra que yo llevaba, en el mismo color solo que, él tenía la auténtica y yo una imitación japonesa. La guitarra era una Gibson Marauder en color rojo vino.
No recuerdo la marca de mi guitarra (he tardado muchos años en preocuparme por marcas que no podía comprar). Según un amigo mío, se llamaría algo así como Tecson.
El modelo sí lo sé con seguridad, se llamaba Melody. Lo sé porque encontré un papel donde yo mismo había dibujado el circuito eléctrico de la guitarra.

Esta guitarra era microfónica. Podía hablar a través de las pastillas, sonando mi voz por el amplificador.
Al final, tuve la mala idea de pintar la guitarra con pintura de decoración, en color púrpura y, al final, acabé regalándosela a mi amigo Rubén, una vez que conseguí comprar mi segunda guitarra.

Mi segunda guitarra tuvo un puente Floyd Rose barato. No recuerdo ni la marca ni el modelo. La compré junto a un amplificador de estado sólido barato (Torque 12W) y junto a un par de pedales boss (creo que el Metal Zone 2 y un Digital Delay-Pitch Swifter) y un Wah-Fuzz de Ibanez (WHF-10 o algo así).


De Boy Scout al Hard Rock (la Autoafirmación)

Gracias al destino, viví una época donde en las listas de éxitos estaba gente como: Pink Floyd, Deep Purple, Led Zeppelin, Rolling Stones, Ted Nuggent, Jethro Tull, Genesis, Yes, Jimi Hendrix, Janis Joplin, John Mayal, Peter Green, Fleetwood Mac, AC/DC, Van Halen, etc. ¡La época de los grandes dinosaurios del rock!.

Me quedé colgado de Pink Floyd la primera vez que los escuché (Wish You Were Here). Más tarde, estaba desayunando cada día en Japón, con Deep Purple. Luego, Jimi Hendrix me hizo Voodoo y Led Zeppelin me dejo cansado y perdido.
Mientras tanto, los componentes de Nostoc estaban interesados en empezar a ganar dinero tocando música comercial en fiestas locales, sin siquiera haber aprendido a tocar el instrumento, mientras que mi postura era: "Yo toco mi música gratis, si hace falta pero, canciones populares festivas, ni cobrando".
Así que el grupo se escindió al cabo de un año y, el percusionista (ahora convertido en batería) y el bajista y yo formamos un nuevo grupo, al que llamamos Hydra.
Con Hydra, pasamos del rock sinfónico (inspirado por Pink Floyd, Genesis y Yes) al Hard Rock (inspirado por Led Zeppelin, básicamente).
Siendo una banda de 3, me vi obligado a hacer algo que odio: cantar. La guitarra tenía muchísimo trabajo para poder crear una pared sónica que le diera un poco de fuerza a tan poco instrumento sonando a la vez. Así que fué una época donde tuve que aprender a cantar mientras tocaba y, donde tuve que buscar nuevas formas de expresarme con la guitarra de forma contundente.
Fué una época musicalmente muy interesante. Barcelona era un Herbidero de grupos de música de todos los estilos y, todos los grupos estábamos en contacto, puesto que había muy pocos locales de ensayo en Barcelona y, al final, todos los grupos acababamos en el mismo sitio. En esa época, estuvimos en contacto con Los Hum, Último Resorte, Cacao pal Mono, Locomotora de Vapor, Distrito V y muchos otros grupos que, participaban en Las 6 Horas del Hyde Park. El Hyde Park era un parque hundido que había en el barrio de la Verneda, al que bautizamos así porque era donde nos juntábamos los Hippies de la época. En dicho parque conseguimos organizar un evento anual que se llamó Las 6 horas del Hyde Park, donde podían tocar los grupos de la Verneda y Besós, así como cualquier otro grupo que se apuntara.

En aquella época el nivel de los grupos de Barcelona era muchísimo mejor que el de los grupos de Madrid pero, Madrid promocionaba cualquier grupo, mientras en Barcelona, los políticos estaban dándo subvención a grupos que cantaran en catalán. Aún hoy en día, si tu grupo no canta en catalán, tienes serias dificultades para promocionarte en Barcelona.

Como siempre, yo no tenía amplificador. Nos conectabamos el bajista y yo a una mesa de 4 canales que yo mismo había construído con un kit de una tienda de Radio, que era alimentada con una batería de 12V de mi Scalextric. La voz, el bajo y la guitarra salían por el amplificador de bajo propiedad del batería. Ya puedes imaginarte la calidad del sonido...


El final precipitado de una carrera: el Servicio Militar (o como joderte la vida)

Cuando estaba viviendo mi mejor momento personal, disfrutando como loco con la música, fuí secuestrado por el gobierno para convertirme en la niñera de un estúpido oficial del ejército español.

La última semana antes de marchar a la puta mili, el batería llamó a mi interfono y me dijo: "qué te parece si bajamos con los instrumentos a la calle y tocamos al aire libre".
Le dije: "¿estás loco?, ¿cómo vamos a montar la batería?, sabes qué... avisa a Moisés y, si el está de acuerdo, nos ponemos en movimiento ya".
Y, así lo hicimos, trasladamos la batería muy cerca de mi piso, bajamos los amplificadores, las guitarras, los pedales, los cables... montamos todo, enchufamos con un alargo en mi piso y, nos pusimos a improvisar en mitad de la calle durante un par de horas.
Los coches se paraban extrañados y, pronto, se fué conglomerando una multitud de gente curiosa. Nadie llamó a la Policía y, pudimos actuar en vivo durante dos horas con total comodiad. Fue un día precioso.

Más tarde, intentamos hacer los mismo en el balcón de un 7º piso pero, tras el primer acorde. El vecino salió chillando que iba a llamar a la policía, así que, nos quedamos con las ganas.
Durante el servicio militar, el batería se encargó de vender el amplificador y la batería, con lo cual, desapareció cualquier oportunidad de continuar con el grupo. A mitad de año, contacté con otro amigo (Albertus) que se había llevado su guitarra eléctrica, la cual tocaba a través de uno de los amplificadores de comunicaciones del ejército que estaban en eterna reparación (lo había reparado hacía meses pero no lo devolvía). Así que yo también me llevé mi guitarra y estuvimos tocando juntos, mirando cómo evolucionaba el sonido en el Ociloscopio (¡vaya par de colgados!).

Tras la mili, sin amplificador y sin grupo, probé sustituir a un guitarrista (que se iba a la mili) en un grupo llamado N-342. Me encontraron demasiado DURO para sus temas de Rockabilly, así que no prosperó la cosa.

Finalmente, conseguí montar un grupo con Albertus y sus amigos: Maria José (su mujer) como cantante, Santi como guitarra, Carlos a la batería y Albertus al bajo. Llamamos al grupo Lenguas de Fuego y, pasamos del Hard Rock de los 70 a toques más metaleros de los 80. Nos hicimos bastante amigos de Los Últimos de Cuba, con los que pasamos buenos ratos, nos movimos mucho por La Oruga, en Nou Barris y, fué bastante divertido mientras duro. Santi era muy buen guitarrista, tal vez el único músico de todo el grupo. Todo el mundo era muy indisciplinado y, sacar adelante los temas era realmente complicado. Al final, el grupo se disolvió, posiblemente en un máximo de un año.

Albertus estuvo llevando unos estudios de grabación (Estudios Libra), donde llegaron a grabar algún disco los Mojinos Escozios. Otra curiosidad, dos de los integrantes de Mojinos Escozios, trabajaban en la misma fábrica que yo, aunque no teníamos contacto por aquella época.

Con 23 años me quedó bien claro que nunca iba a vivir de la música. Conseguí mi primer trabajo estable y, me dediqué en cuerpo y alma a aprender mi nuevo oficio.
Durante esos años ví, con orgullo, como algún vecino (Cisco, guitarra de Legion) conseguía mucho más en mucho menos tiempo.
He estado 18 años en los que he tocado la guitarra esporádicamente y, he vuelto con ganas hace unos 3 años, donde me ha tocado re-aprender todo lo que sabía y todo lo que no sabía.

A los 27 años conseguí comprarme mi primera guitarra de marca: una Fender American Stratocaster, comprada en 1991, momento en el que vendí mi guitarra Floyd Rose. Esa ha sido mi única guitarra hasta el año 2008, año en el que la vendí, tras hacerle mi propio diseño en cableado (Hermetico's Stratomule mod 3 http://www.youtube.com/hermeticoguitar).


Volviendo de la Oscuridad (o nunca es tarde si la dicha es buena)

Como estaba colgado de Jimi Hendrix, mi obsesión fué tener una Stratocaster. Finalmente, pude comprarmela pero, ya no tenía grupo, no tenía amplificador... me he pasado años tocándola desenchufada y poniendo el sonido en mi cabeza.

Mi siguiente objetivo fué comprar un amplificador Marshall.
Se me adelantó mi mujer y, en unos reyes, tuvo el increíble detalle de comprarme un Marshall Valvestate de 30W.  Me hizo mucha ilusión y se lo agradezco de corazón.
El tema es que ese amplificador nunca me gustó como sonaba y nunca disfruté tocándolo, lo que me llevó a pensar que Marshall era un engaño (y ha hecho que no vuelva a probar un Marshall en más de 18 años).
Para simplificar las cosas, vendí todos mis pedales analógicos a precio de saldo (vaya error) y me compré una pedalera (Zoom 4040) que, incremento mi paleta sonora pero, empeoró mi sonido.
Al año, pasé de la 4040 a la Zoom GFX-9, con la cual ya empecé a disfrutar de una mejor calidad de sonido.

Cuando compré mi primer PC, en 1997, empecé a jugar con mi primer programa DAW, Cakewalk 3.0. La idea era poder grabar los temas que había compuesto y que nunca había conseguido hacer sonar bien en ningún grupo.
La realidad es que el programa era bastante limitado y que mi ordenador aún lo era más, por lo que me dediqué a secuenciar composiciones de estilo clásico y a jugar con sonidos sintetizados (introduciendo nota a nota con el ratón!!!).

No fué hasta el 2007 que tuve un PC aceptable, con una tarjeta de sonido aceptable y un programa aceptable (SONAR 5) que me permitían grabar la guitarra sin que se viniera todo abajo. Entre 2007 y 2008, realicé una banda sonora de 3 pistas para el DVD de espeología de un amigo, un DVD que se iba a presentar junto a un libro sobre el mismo tema.
Aunque el sonido era mucho mejor que nunca, aún era malo. Acabé vendiendo la GFX-9 y comprandome una Line6 POD X3 Live, actualizando a SONAR 7 y, comprando y vendiendo varias guitarras y efectos en búsqueda de mi propio sonido.

Finalmente compré mi primer amplificador a válvulas: un Koch Studiotone Combo.

Y visité el estudio de grabación de otro amigo (Guille, hermano de Javi, batería de Hydra), donde aprendí todo lo que me falta por aprender de audio. Me permitió grabar mi primer tema en estudio y, tuve la ocasión de conocer gente muy interesante (UGE, ex Siniestro Total, Chiche de la orquesta Trafic y otros). El hijo de Guille, Ivan (Rosa-Luxemburg) y su compañero de grupo, se ofrecieron con toda generosidad a grabar la batería y el bajo para dicho tema. Alex Nagy, que también andaba por ahí, me corrigió la letra en inglés y se ofreció para cantar el tema (bajo una fuerte afección de garganta).
Fué muy divertido todo... mientras duró.
Actualmente, Guille con sus amigos, han montado un grupo llamado Funkderground. Espero que les vaya bien.

Volver a Empezar

¿Dónde estoy ahora?

Después de comprar y vender varias guitarras, creo que me he hecho con las básicas para cubrir prácticamente cualquier necesidad.
Después de comprar y vender varios pedales de efectos, creo que me he hecho con los pedales que más me gustan.
Después de compar 4 amplificadores, tengo el sonido que quería.
Después de actualizar mi equipo a ProTools y, mejorar mi propio estudio casero de grabación, tengo buenas herramientas para grabar y mezclar.

Por tanto, estoy trabajando en mis propios temas. Aprendiendo las técnicas de grabación, mezcla y masterización, el trabajo con loops, etc. La idea sigue siendo la misma: grabar un CD que incluya mis propios temas y, regalarle ese CD a mis amigos, solo por el placer de hacerlo.

Mientras tanto, todo lo que he ido probando lo he intentado plasmar en este blog.
He desarrollado una habilidad muy especial para diseñar los circuitos de guitarra mas bizarros que puedas imaginarte. He participado 3 años en el forum de Seymour Duncan, ayudando a numerosa gente a diseñar el circuito de su guitarra (recientemente, me he dado de baja y borrado los 2500 mensajes que había creado), he hecho diagramas por encargo para músicos profesionales de estudio y para locos entusiastas de la guitarra (algún diseño ha sido realmente megalítico).
Sigo afinando la búsqueda de mi propio sonido pero, cada vez estoy más cerca.
He redescubierto Marshall y estoy encantado. Ya he acertado con casi todos los efectos que me gustan, excepto con el Fuzz (estoy detrás de un D*A*M Professional MKII Tone Bender)...

O sea, que tengo casi todo lo que necesito, excepto un espacio acústicamente tratado donde pueda grabar voces y amplificador y, donde pueda mezclar con un volumen aceptable.

De algunas cosas que voy probando, voy colgando mis propios videos en Youtube ((http://www.youtube.com/hermeticoguitar), donde ya se puede apreciar la enorme diferencia en calidad entre los primeros videos que colgué (penosos en todos los sentidos) y los 4 ó 5 últimos que he ido colgando.
Si has leído hasta aquí, te felicito, eres de los pocos españolitos a los que les gusta leer y, además demuestras una paciencia sin parangón. A tí, pues, muchas gracias por tu atención.